Desde primeros de
Mayo de 2018, tenía anunciada la visita desde los U.S.A. del escritor,
caricaturista y locutor chileno-portorriqueño Arturo Yépez-Pottier a España
para presentar su libro-blog "La Lágrima En La Garganta
- lalagrimamelliza.wordpress.com", en
Madrid y Barcelona, allá para el mes de Octubre; aprovechando a
requerimiento y consejo de diversos colegas y amigos tal circunstancia, para
girar visita a mi domicilio, al objeto de escuchar esas cosas de Gardel que en
ningún otro lugar del globo le sería posible audicionar. Lo que en
su día me dio a pensar que llegada la fecha propicia para ello, me pondría en
contacto con los miembros gestores actuales de La Peña Los Amigos del Tango,
para ofrecerles la posibilidad de una presentación del libro en Alicante y en
su sede. Lo cual a Arturo que conservaba una imagen
idealizada de la misma desde Mayo de 1978, fecha en la que había acudido a una
sesión sabatina en esta, le pareció una excelente idea.
Yo realicé la propuesta con
ciertas reservas, pues como cuento en el capítulo "Gestión Avenida Carlos
Gardel en Alicante" y anteriores de este mismo blog, mi relación con un
sector de los argentinos contactados en su día con respecto a dicha
iniciativa, fue altamente decepcionante. Dándose la circunstancia
de que aquel "ministro" que despachaba en dependencias prestadas por
nuestra universidad, con el que en su día nos entrevistamos, se adjudicó falsamente
ya en aquellas fechas, la titularidad, "precisamente" de dicha peña. Ello al margen de que también intuía, que
la tradicional gala-espectáculo cantado de los sábados, con acceso a público
ocasionalmente invitado había sido suprimida de las actividades de la misma.
En fin; el caso es que
llegados primeros de Septiembre, concretamente el día 7, Arturo me pone un
correo, recordándome los pormenores de su ya más próximo viaje, así como la
idoneidad de las fechas para contactar con la peña y pulsar su opinión sobre
nuestro proyecto de presentación del libro. Cosa que concreté
el pasado sábado día 8, llamando al teléfono que el ente tiene anunciado en su
página de Internet.
Tras tres o cuatro llamadas
fallidas, se puso al otro lado Andrea, quién me notificó que se hallaba en el
extranjero y que por esa razón ya no iba por la peña, pero que la idea le
parecía genial y muy de agradecer por lo prestigiante que era a su juicio para
la asociación, y que debía exponérsela a "Norma", que era la persona
que actualmente dirigía los destinos de la misma. Cosa
que tras agradecerle su amabilidad y buena disposición, realicé de inmediato.
Las llamadas a Norma por la falta
de éxito para el contacto también fueron varias, lo cual aduje a la
retransmisión en directo televisada del encuentro de futbol entre las
selecciones de Inglaterra y España. Y en efecto, allá
como a la hora de haber finalizado este, finalmente Norma estuvo de
interlocutora.
Y efectivamente, tras la
pertinente indicación de quién me había facilitado su número telefónico,
presentación incluyendo antecedentes de mi antigua membresía, exposición del
personaje que nos visitaba con alusión a su condición de socio honorífico de la
entidad y finalmente manifestación de nuestra propuesta; la
sorprendente e insospechada respuesta de Norma fue que; para esa
fecha le era imposible acceder a nuestro pedido, porque "ya
tenían contratadas todas las orquestas para la milonga"
(?)... y yo me pregunté, ¿que tendrá que ver una cosa con
la otra?. Insistí argumentándole que para la
presentación no les llevaría mas que diez o quince minutos y que a mi modo de
ver, ese no era un tiempo como para no quedar bien con una persona de tan dilatada
trayectoria gardeliana, que se desplaza desde tan lejos; a lo que para no radicalizar más su posición,
repuso que el jueves siguiente, expondría el asunto a la junta directiva y ya
me diría algo, no sin antes confirmarme para afear mis afirmaciones, que durante
nuestra breve charla, había consultado su registro de socios honoríficos y allí
no figuraba ningún Arturo Yépez. Y así quedó la cosa,
que inmediatamente comuniqué a éste, dado que mi impresión fue que en absoluto
iba a prosperar el asunto.
Documento
acreditativo de la manifestación efectuada al respecto, negada por la actual
directora de la peña. Hasta ese
extremo llega el esperpentismo de esta gente.
El lunes 10 a
eso de las 10,30 h., estando en una parada de autobús, recibo llamada de
Andrea, diciéndome que tenía en su teléfono dos llamadas perdidas mías, que en
efecto correspondían a aquellas que le efectúe el sábado y que no obtuvieron
respuesta. De cualquier modo aproveché para comunicarle
lo que me había ocurrido con Norma, cosa que la dejó petrificada de sorpresa e
indignación y por la cual, sin motivo alguno, me pidió reiteradamente
disculpas, invitándome a que disculpase e insistiese; cosa que le
hice ver estaba prácticamente desestimada, pues aparte de haberle notificado ya
a Arturo el resultado de la gestión, tampoco había sido en absoluto una cosa
fundamental en el proyecto de su viaje, sino más bien un modo de reverdecer
ciertas nostalgias, que la desafortunada reacción de la dirección de la peña,
había acabado por desgraciar.
Pues bien; al
parecer Andrea no quedó muy conforme con el cariz que habían tomado los
acontecimientos y quizá desde la lejanía de su asentamiento en el extranjero,
tomó alguna iniciativa, puesto que el miércoles día 12, recibí una inesperada llamada
de Norma en un tono más conciliador, interesándose por mi nombre y ascendencia
gardeliana, así como con más detalle, también por el de Yépez, pero sin cambiar
un ápice en lo referente a lo que había impulsado mi contacto del sábado,
haciendo ver que le importaba un poco, con hipótesis de cambios de fechas que
por lo ya explicado, sabía perfectamente imposibles, y acabando de arreglar su
alocución, aseverando que -ya se habían escrito muchos libros sobre Gardel, y
que en los cuales no siempre se cuentan verdades- para finalizar
afirmando que en una ocasión interrumpió unos minutos el bailongo para
presentar y que disertara una directora de cine, cuyo nombre no tomé, y que le
pegaron una gran bronca los milongueros, con lo cual, se juró que eso no
volvería a pasar.
Pasados dos
días y reflexionando sobre las dos llamadas, creo haber dado con la clave que
propició al menos la segunda de ellas.
Resulta que
en el transcurso de la primera, tenida el lunes durante mi trayecto en bus con
Andrea, se me escapó un lamento en el sentido de que, "quizá" habían
actuado con tanta suficiencia y desprecio hacia un vecino de la localidad y
antiguo socio de la entidad, a pesar de probablemente seguir percibiendo de la Exma.
Diputación Provincial la antigua subvención que ésta le tenía asignada a
la peña; a lo cual aquella, acusando el golpe con una manifiesta protesta
y poniéndose en guardia, rápidamente repuso que en absoluto reciben subvención
alguna de tal entidad, y que todos los gastos de mantenimiento de la peña son
sufragados en su totalidad por sus actuales dirigentes y socios, por amor al
tango.
No obstante y como en los tiempos que corren no es un
dechado común el ejercicio de la práctica de la veracidad, creo conveniente
advertir a nuestras autoridades sobre lo ocurrido, al tiempo de manifestarles
que si en términos culturales, este es el servicio que están dispuestos a
ofrecer a la sociedad alicantina, de la cual tomaron la herencia, al menos de
la longevidad que con tanto orgullo exhiben de la entidad que dirigen, y
siguiesen percibiendo de nuestra Exma. Diputación Provincial cualquier tipo de
subvención, por mínima que esta fuese, sería muy conveniente que dicha
corporación revisase la procedencia de la misma, en base a tan displicente e
infausta actuación, rayana en un tan injusto como injustificado revanchismo,
tan solo privativo de quienes en ningún tiempo, tuvieron o dirigieron nada. Por lo cual, si es tan privado y sus
miembros tan rígidos y exigentes en sus apetencias, justo será que se lo
autofinancien ellos solitos.
El tan cacareado agradecimiento expresado
en su página web hasta la saciedad, al momento de tomar posesión, sólo duró lo
que tardaron en redactarlo y aposentarse.
¡Todo muy especializada y falaz cháchara,
vacía de sentimientos!.
Y como no hay mal que por bien no venga, tan solo
agregar que, al menos, la fallida gestión realizada, ha servido para confirmar
mi presagio fundamental sobre las actividades actuales que se llevan a efecto
en la misma, las cuales no pasan de las habituales en una monda y lironda
milonga para distraer bailarines; y... ¡nada
más!.
De lo que fue la peña en su origen, no ha
quedado ni la sombra, cuanto ni menos de su espíritu. Todo se
ha esfumado. Y que conste que lo digo sin el más mínimo sentimiento
de nostalgia.
Es una auténtica lástima que sus (por lo
general) admirables dotes para fabricar bellísimos pasos de baile, estén tan
frontalmente reñidos con una coherente actitud didáctica y cultural de las
esencias interpretativas y poéticas del género; y sean tan refractários a
iniciativas exteriores que tan sólo tienen la pretensión de subrayar y ensalzar
la trayectoria artística de su máximo Cantor. Cuanto ni menos, su total falta de empatía
y tacto en el trato, con personas que de algún modo, contribuyeron en su día a
crear, amenizar y expandir, aquello que ahora tan sectariamente dirigen.
De la
decepción y desengaño de Arturo Yépez mejor no hablar... tan
sólo diré que ha sido tan profundo el efecto que me han causado su encaje del
golpe y reflexión, que yo que me tengo por una persona bastante paciente y a
mis años, reflexiva, totalmente afín a la máxima "¡nunca digas, nunca
jamás!", me he prometido a mi mismo que sin mayores disquisiciones, ¡de
ningún modo en la medida de lo posible, volveré a pisar ese antagónico suelo!.
...¡Pobre Alicante!.
¡Salute!.